Siguen llegando preguntas, así que vamos a ello: Voy a intentar contestar a unas preguntas que se me plantean repetidamente sobre el desempleo y la pobreza en España.
¿Qué es más urgente y prioritario el paro o la pobreza en España?
¿Hay soluciones posibles a estos dos problemas?
La verdad es dada la extensión de mis artículos que el asunto se presenta complicado, sin embargo, entiendo que no se puede escurrir el bulto y no decir nada, de manera que vamos a entrar en la cuestión, precisando una serie de cuestiones preliminares, así:
** Creo qué de diez asuntos, en mi opinión el desempleo y la pobreza en España estarían colocados de los cinco primeros, siendo, además, dos problemas reales, prioritarios y muy interconectados.
** Señalaré algunos datos significativos de forma breve:
* Desempleo (Datos INE 2019. EPA):
Población total (miles): 46.934,6.
Ocupados (miles): 19.874,3.
Parados (miles): 3.214,4.
Tasa de actividad: 58,72.
Tasa de paro: 13,92.
* Pobreza datos:
INDICADOR AROPE. En el año 2018, un total de 12.188.288 personas, que suponen el 26,1 % de la población española está en Riesgo de Pobreza y/o Exclusión Social. Se mantiene la tendencia descendente por cuarto año consecutivo, pero se rebaja mucho la intensidad de la reducción. Con respecto al año pasado, el indicador bajó medio punto porcentual, lo cual, combinado con el leve aumento de la población, implica que unas 190.000 personas dejaron de estar en riesgo de pobreza o exclusión social.
** Queda claro, que España tiene dos problemas importantes y urgentes: Desempleo y Pobreza, por otro lado, muy interrelacionados.
** Existen una serie de realidades (sin ánimo de ser exhaustivo), que se deben destacar:
* El paro y la pobreza son dos problemas enquistados, en mayor o menor medida, en toda España.
* El desempleo está lastrado por una regulación dirigida a la cantidad más que a la calidad de las soluciones. Solo a título de ejemplo: se busca crear empleo de cualquier clase, pero que figure en las estadísticas siempre a la baja, no importa que el trabajo sea temporal (contratos de horas, de días, en definitiva contratos muy precarios en el tiempo), que los salarios estén en el límite de la pobreza y las condiciones de seguridad y salud laboral en el nivel de mínimos (salarios de cuatro horas, unidos al salario mínimo, y, en muchos casos empresas insolventes, todo ello, unido a inseguridad, falta de formación en muchos sentidos, y, donde la vigilancia de la salud se sitúa realmente en la nada); y, que las jornadas de trabajo sean interminables en muchos casos y fuera de todo control salarial.
Por todo lo dicho, la pobreza asoma como parte real del problema del paro se mire como se mire, de manera, que el umbral de la pobreza es una realidad dentro del mundo laboral: No solo hay pobres de necesidad, hay muchos trabajadores dentro del umbral de la pobreza.
* Estoy convencido, que la verdadera batalla se debe dar, rompiendo el tremendo arrecife de los 3,2 millones de desempleados, pero dejando claro, que hay que desterrar el empleo precario (sea como sea -temporalidad extrema, jornadas abusivas, etc.-), ya que sin solucionar el problema de un empleo digno no habrá solución para la pobreza.
* La situación política está en el límite de la autodestrucción, las reformas estructurales reales se han guardado bajo siete llaves, y, nuestra deuda pública roza el 100% del PIB, a lo que hay que unir un gasto público descontrolado en todos los sentidos (se despilfarra mucho y, además, se realizan pretendidas inversiones innecesarias y costosas sin rendimiento económico ni social).
* El sistema de la Seguridad Social está quebrado y si no se reforma de forma radical, estaremos bordeando el abismo de la nada.
* Los impuestos en todos los niveles de la administración pública (municipal, provincial, autonómico y estatal) está rozando un límite, que la presión impositiva no podrá sobrepasar.
* Por último, garantizar y ampliar el sistema de libertades, `pues está más que probado, que las sociedades más libres son las más creativas, y, se necesita mucha creatividad.
En resumen, por todo lo dicho, está muy claro, que el paro y la pobreza están unidos se quiera o no, de forma, que las posibles soluciones deben ir unidas, aunque por algún sitio habrá que empezar. Así, que señalaré una serie de medidas (de otras muchas), al objeto de abordar ambos problemas:
1ª.- Adecuar el gasto publico a la realidad económica, destinando los excesos (emisión de deuda pública) a combatir el paro y la pobreza.
2ª.- Reformar la Seguridad Social dentro de su posible realidad económica y social. Dicho de otra forma: No dar nunca nada que no se pueda dar.
3ª.- Mejorar de verdad el sistema educativo, buscando siempre la consecución de realidades sociales.
4ª.- Conseguir una regulación social ágil y eficaz, que se dirija a combatir el desempleo y la pobreza, penalizando siempre el empleo precario esté donde esté y cualquiera que sea su naturaleza.
N.B. El desempleo y la pobreza, sin duda, son dos problemas prioritarios abandonados en España, pero muy ligados entre sí, de forma que hay que combatirlos a la vez y sin pausas de gobiernos alternativos. Que coste, que soy optimista, porque creo que existen soluciones válidas, pero hay que aplicarlas sin pérdida de tiempo y todos empujando en la misma dirección.
Córdoba, a 29 de noviembre de 2019
Fdo. Enrique García Montoya.
Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.