Monthly Archives: November 2022

Jueces en stand by (independientes – inamovibles – responsables y sometidos solo ante la Ley)

La Constitución Española en su artículo 117 establece:

1.  La justicia emana del pueblo y se administra en nombre del Rey por Jueces y Magistrados integrantes del poder judicial, independientes, inamovibles, responsables y sometidos únicamente al imperio de la ley.

2. Los Jueces y Magistrados no podrán ser separados, suspendidos, trasladados ni jubilados sino por alguna de las causas y con las garantías previstas en la ley.

3. El ejercicio de la potestad jurisdiccional en todo tipo de procesos, juzgando y haciendo ejecutar lo juzgado, corresponde exclusivamente a los Juzgados y Tribunales determinados por las leyes, según las normas de competencia y procedimiento que las mismas establezcan.

La división de poderes real es la base de toda democracia que se precie y el fundamento de nuestro Estado Social y Democrático de Derecho, de forma, que lo que está pasando en España es una cosa extremadamente peligrosa por muchos y evidentes motivos, así:

1º.- Los jueces que son el poder judicial están mudos, en espera y  en situación de parálisis.

Es cierto, que no todos ni mucho menos, pues solo hay que bajar un poco al escalafón para comprobar que una mayoría de jueces están por el imperio de la ley y escandalizados con lo vienen soportando; de manera, que me refiero a las cúpulas judiciales representadas por sus asociaciones politizadas e incapaces de hacer nada, solo alzar la voz al vacío de la nada.

2º.- Los partidos políticos, especialmente, los dominantes han aceptado el principio de que el poder ejecutivo debe ser dominante, sometiendo a los jueces y eliminando cualquier vestigio de independencia.

3º.- Es, también, cierto, que no es de ahora, pues desde la reforma del poder judicial del Presidente F. González hemos ido de mal en peor hasta llegar a la situación actual, donde ya sin disimulos se quiere “eliminar la independencia del poder judicial”.

Así mismo, es cierto, que los jueces y sus asociaciones ideologizadas han venido participando en el reparto de ese poder oscuro con total aceptación participativa, aunque, no han sido solo ello/as, sino que, también, parte de la sociedad civil ha pasado encantada por ese aro perverso dirigido a eliminar de hecho la división de poderes del estado.

Ahora, tenemos lo que hemos permitido todos de una u otra forma.

Expuesto todo lo anterior, no deja de sorprender, que la sociedad civil parece que acepta cualquier ataque a la división de poderes, siendo la sorpresa aún mayor cuando se vislumbra una aceptación tácita de los jueces a los ataque tremendos que están recibiendo, una y otra vez, sin pausa ni respiro:

*Machistas.

*Mal preparados.

*Sin formación.

*Presuntos prevaricadores,

*Etc. etc.

Hace muchísimo tiempo, que no contemplo un ataque tan injusto y malévolo contra alguien, de manera, que somos muchos los que no estamos de acuerdo y no nos vamos a callar. Lo digo desde una posición de francotirador contra todo lo que supone una falta de respeto a la ley, pues, la mayoría de los jueces que conozco son no solo buenos jueces, sino, también, personas honradas, aunque por descontado, disentir de sus resoluciones en un derecho de cualquier español reconocido en la C. E.

Ha llegado el momento, de poner pies en pared para defendernos todos, de manera, que pronto habrá elecciones municipales, autonómicas y después elecciones generales: “Es la ocasión de decir basta ante tanto desafuero y tanta injusticia preñada de abuso de poder”.

N.B. Los Jueces en stand by aunque según la Constitución son independientes – inamovibles – responsables y sometidos solo ante la Ley.

A pesar de ello, este asunto-problema de todos, de manera, que callar nos hace a todos cómplices del despropósito político contra ellos

No estoy de acuerdo, creo que tenemos buenos jueces y, además, bien formados, que puedan existir casos espurios, seguramente,  pero algunas frutas podridas solo demuestran que las demás no lo están.

La seguridad jurídica es de todos y, por supuesto, de los jueces también.

Córdoba, a 24 de noviembre de 2022

Fdo. Enrique García Montoya

Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.

Dos caras de la misma moneda (amnistía fiscal – fin de la malversación)

Es lo mismo, pero al revés, de forma, que la ley se utiliza en favor de los que viven al margen de ella.

La C. E. en su art. 14 dice:  “Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.

Con la amnistía fiscal pasada y declarada inconstitucional pasa lo mismo que ahora con la rebaja a la nada de la malversación:

Solo unos pocos – muchos son los agraciados, el resto, los 47 millones de españoles que quedan:  “A pan y agua”.

Dicho de otra forma, el periodo de ayuno de los españoles en general está en un bucle sin fin, llevando mucho tiempo sin disfrutar de cosa alguna.

Es como la Ley del {solo si es si}, que curiosamente beneficia a unos pocos desquiciados de lo peor.

Visto lo visto, aunque queda poca esperanza, el día que algún político defienda los intereses de la gran mayoría de los españoles y el Estado Social y Democrático de Derecho, optando los ciudadanos perjudicados (es decir, casi todos) por seguirlo, la democracia se dará un respiro en España.

En un artículo anterior preguntaba, ¿cómo está la justicia?, diciendo que la respuesta era fácil en esa ocasión: “Como la política”.

Ahora la pregunta se contesta sola, ¿cómo está la Ley?, como la política y la justicia: <<Bajo mínimos>>.

*A la amnistía fiscal (fallida e inconstitucional) del Presidente Sr. Rajoy se acogieron todos los defraudadores habidos y por haber.

*A la rebaja de la malversación se apuntaran todos y más de los expropiadores del dinero público.

Queda claro que es lo mismo, unos pocos (aunque muchos se digan honrados) son y serán los agraciados por la ley, el resto de esos 47 millones de españoles, “pan y agua”.

Dicho de otro modo, los ciudadanos sienten que la ley se construye por ideologías políticas y en beneficio de unos pocos, aunque se puede dudar, pero cuando se meten los dedos en la llaga la verdad es la que es.

Está muy claro para el Pueblo: “La ley “como la Justicia” y “como la política”; y, eso para nuestra democracia es algo muy malo, de forma, que en las elecciones próximas se puede y hay que poner pies en pared para que todo no siga igual.

El espectáculo al asistimos los ciudadanos viendo como usurpan el poder del Pueblo soberano y mangoneando sin mesura la ley a su antojo, no se puede aceptar en ninguna democracia que se respete en sus libertades fundamentales, de manera, que ahora a votar en libertad y sin complejos ni miedos de clase alguna, ya que, el silencio callado y oprobioso conlleva asentimiento contra los ataques a nuestro Estado Social y Democrático de Derecho Constitucional.

La norma debe ser para todos por igual, sea cual sea su formación política o su ideología, de manera, que el espectáculo obsceno al venimos asistiendo, que continúa sin tregua ni descanso, debe terminar, si queremos vivir en una democracia con derechos y libertades fundamentales.

N.B. Son dos caras de la misma moneda, por ley de la amnistía fiscal al fin de la malversación.

No podemos confiar en la política, ni en la justicia ni en la ley, de manera, que, sin ninguna duda, algo malo está pasando.

La seguridad jurídica ¿existe en España? – Pues, ESO.

Córdoba, a 16 de noviembre de 2022

Fdo. Enrique García Montoya

Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.

Elecciones municipales – Jueces – independencia – ideología (división de poderes)

Preguntan algunos lectores sobre ¿cómo está la justicia?, siendo la respuesta fácil en esta ocasión: “Como la política”.

Que cada cual saque sus conclusiones, pero está claro, que su deterioro es evidente, de manera, que en España la división de poderes, base de toda democracia, esta en claro retroceso, por no decir, en extinción.

Dicho de otro modo, los ciudadanos sienten que la justicia se diluye entre ideologías políticas y jueces que parecen incapaces de proclamar su independencia y su imparcialidad, confundiéndose como parte de la Administración -poder ejecutivo-, cuando deberían ser poder judicial independiente, real y constitucional base de nuestro Estado de Derecho.

La Constitución Española en su TÍTULO VI, gira con el nombre de  -Del poder judicial-  y en su artículo 117 dice, en sus números 1., 2., y 3., que: << **La justicia emana del pueblo y se administra en nombre del Rey por Jueces y Magistrados integrantes del poder judicial, independientes, inamovibles, responsables y sometidos únicamente al imperio de la ley. ** Los Jueces y Magistrados no podrán ser separados, suspendidos, trasladados ni jubilados, sino por alguna de las causas y con las garantías previstas en la ley. **El ejercicio de la potestad jurisdiccional en todo tipo de procesos, juzgando y haciendo ejecutar lo juzgado, corresponde exclusivamente a los Juzgados y Tribunales determinados por las leyes, según las normas de competencia y procedimiento que las mismas establezcan.>>

Está muy claro para el Pueblo: “La Justicia “como la política”; y eso para nuestra democracia es algo muy malo, de forma, que en las elecciones municipales próximas se puede y hay que poner pies en pared para que todo no siga igual”.

El espectáculo al que hemos asistido de partidos políticos usurpando el poder del Pueblo soberano y mangoneando sin mesura la justicia a su antojo, no se puede aceptar en ninguna democracia que se respete en sus libertades fundamentales, de manera, que ahora a votar en libertad y sin complejos ni miedos de clase alguna.

No se puede confiar en jueces ideologizados y está muy claro para casi todos los españoles, que los jueces metidos a políticos no pueden vestir toga.

Se dice que la justicia es ciega, aunque mejor sería decir, que era ciega, pues ahora algunos-muchos jueces tramitan causas y dictan resoluciones encamadas en su ideología personal excluyente, consiguiendo algo perverso, que residen en que se pueda pensar que todos los jueces son iguales, lo que, simplemente, es una burda mentira, no ayudando desde luego el silencio persistente y soterrado de los miembros del poder judicial tanto individual como colectivo, a través de sus organizaciones judiciales que por sus propios nombres se definen: conservadores, progresistas, del medio centro e incluso independientes (que es el no va más).

A pesar de todo, se puede comprobar un gran colectivo de jueces y magistrados del día a día en los juzgados y tribunales, que, sin más, están indignados por lo que está cayendo sobre “todos ellos” sin distinción.

Sin embargo, admitiendo ese hecho de que no son todos, ni mucho menos, lo cierto es que, lo que se oye, es el murmullo turbio de las voces atrabiliarias que rezuman ideología contra ley, de forma, que como en todo lo que está pasando en España en todos los niveles, el silencio callado y oprobioso conlleva asentimiento contra la división de poderes base de nuestro Estado Social y Democrático de Derecho Constitucional.

Se dice, que el que calla otorga, y, ha llegado el momento de demostrar que la mayoría de jueces son personas libres, imparciales e independientes y que se rigen por la ley y los principios de la Ética Judicial.

Por otro lado, debe quedar aún más claro, que este asunto de la independencia del poder judicial no es solo de los jueces, sino que afecta a todos los españoles, lo acepten o no, de manera, que habría que pedir a las asociaciones de juristas, colegios de abogados y procuradores, catedráticos y juristas de prestigio, diputados, senadores, corporaciones de derecho, ayuntamientos, comunidades autónomas, diputaciones, etc. etc., tanto a nivel colectivo como personal, que levanten la voz, pues un espectáculo tan “obsceno” como el que está viendo y soportando, día tras día, nos lleva a una democracia autocrática y de segunda.

Se podría empezar, además de protestar sin fin, exigir que, el juez que quiso legítimamente un día cambiar su toga “imparcial y ciega” para entrar en un partido político (en la política) asuma, que en un  tiempo prudencial no podrá devolver a su partido la afiliación y sentarse de nuevo con su toga de justicia, pensando que está libre de polvo y paja y que su traje judicial está impoluto de todo el camino recorrido, exigiendo, así mismo, a ese juez  de ida y vuelta, que se someta a un proceso de selección para su nuevo puesto, aunque se le reserve el derecho de permanecer en su ciudad de origen,

La norma debe ser para todos por igual, sea cual sea su formación política o su ideología, pues, de ninguna forma, el haber estado en política puede ser un trampolín para mejorar en el poder judicial por encima del resto de jueces (mayoría), que han seguido impartiendo justicia con mayor o menor acierto.

El estar en política y servir al pueblo de por si es un privilegio, de manera, que seguir disfrutando de ese privilegio volviendo a vestir la toga sin pausa ni tiempo intermedio es pura y simplemente un ejemplo de máxima estulticia para al Pueblo, de donde, como dice la Constitución, nacen los poderes del Estado.

El espectáculo obsceno al venimos asistiendo, que continúa sin tregua ni descanso, debe terminar, si queremos vivir en una democracia con derechos y libertades fundamentales, siendo lo peor, que todo se pega, sobre todo los malos ejemplos, irradiándose como un flujo maligno por la sociedad civil y corrompiendo a muchas- algunas personas.

N.B. El poder judicial independiente formado por jueces imparciales, libres y cumplidores de la ley es la base de nuestra democracia y de nuestro estado de derecho, siendo las elecciones municipales un buen momento para empujar en esa dirección, así que, a votar en libertad.  

Si no podemos confiar en la justicia y en que tenemos jueces independientes e imparciales, apaga y vámonos.

El espectáculo de los partidos políticos comprando y vendiendo jueces públicamente no dice nada bueno de nuestra democracia real, ya que, sin verdadera división de poderes la libertad no existe.

 La seguridad jurídica ¿existe en España? – Pues, ESO.

Córdoba, a 8 de noviembre de 2022

Fdo. Enrique García Montoya

Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.

Elecciones Municipales – Córdoba (parados e inactivos)

De nuevo, preguntan algunos lectores sobre el paro y el empleo  en Córdoba, así que, veamos algunos datos e informaciones:

*Lo primero de todo, ahora mismo, nadie sabe la verdad sobre el paro en Córdoba, pues falta cualquier información veraz, solo tenemos los datos de la EPA, los datos oficiales del M. de Trabajo y los que publica la Junta de Andalucía.

*En la provincia de Córdoba hay un total de 776.597 habitantes, de los cuales 380.369 son hombres y 396.228 son mujeres.

*Según la EPA 3T, Córdoba es la segunda provincia con más paro de Andalucía, su tasa de desempleo roza el 22%, tres puntos más alta la media andaluza y casi 10 más que la de España. Solo Granada tiene una tasa de paro más alta, con el 22,5%.

*Ocupados: 290.303. Personas dadas de alta en la Seguridad Social. De ellos, un 20% o más son trabajadores fijos a tiempo parcial o fijos discontinuos. Solo la S. S. sabe su numero real, pero esperar que publicite cuantos son es una utopía trolera.

*Pensionistas:  170.622. Es decir, hay 1,7 personas trabajando por cada pensionista. 

*Parados: 79.095.

*Inactivos reales: 129.378.

*Resto Población: 186.294.

¿Qué problemas tienen el paro y el empleo en Córdoba?

1.- Su número real (desconocido) y su tasa de paro (EPA T. 3).

2.- Los inactivos.

3.- El paro juvenil y el paro de las mujeres.

4.- El paro de los mayores de 50 años.

5.- El paro estructural.

6.- El empleo a tiempo parcial y el crecimiento artificial de los trabajadores fijos discontinuos.

7.- Los trabajadores fijos a jornada completa, los fijos a tiempo parcial y los fijos discontinuos.

8.- El empleo público, que duplica al privado y en ascenso.

9.- La opacidad completa en los datos de empleo y paro, donde solo se conoce lo que se publicita oficialmente y donde la S. S. esta sumida en un silencia oprobioso, siendo la única que tiene datos reales.

Con lo dicho y la situación tan complicada en todos los aspectos que soportamos, las corporaciones locales no tienen otra que intervenir en este asunto primigenio, así que, los ayuntamientos y las diputaciones deben hacer algo, empezando por facilitar a los ciudadanos una información veraz.

No hacer nada con el pretexto de falta de competencias legales es algo inadmisible, de forma, que se puede y de debe.

Reitero, que el desempleo, si o si, crecerá hasta alcanzar tasas insoportable, de forma, que amenazará la supervivencia actual de las pensiones y creará un ambiente social perverso, lo que conlleva que solo las ciudades más competitivas mantendrán unos niveles de empleo aceptables dentro de la crisis.

Es un hecho indiscutible:

*Que hay que gastar solo en todo lo que es necesario, eliminando cualquier gasto superfluo y dilapidador. *En resumen, hay que gastar mejor y extenderse a cubrir necesidades sociales locales.*Las inversiones sociales deben son una prioridad permanente insoslayable, de manera, que cualquier presupuesto local que se haga durante la crisis debe ser expansivo en esos gastos y estricto en gastos personales y materiales innecesarios.*Cualquier presupuesto local debe contener la presión impositiva local, promoviendo y garantizando la creación de riqueza, que incentive el empleo productivo y el nacimiento de puestos de trabajo competitivos bien remunerados.

La realidad es en materia de empleo y paro, que en Córdoba el Ayuntamiento y la Diputación tienen que implicarse y emplearse a fondo, ya que, que no se trata solo corregir el paro, sino de encontrar soluciones para crear empleo productivo digno y ayudar a todos los que necesiten ayuda mientras dura la crisis.

Reitero una verdad absoluta: que nada beneficia más a una ciudad, que tener un gobierno municipal formado por sus ciudadanos elegidos libremente y que todos saben que no tienen otros intereses que el servicio a los cordobeses en todos los sentidos”.

N.B. Córdoba tiene un problema prioritario, que es su paro y su estructura de empleo, todo, además, solapado y oscurecido por falta de información veraz, de manera, que en las elecciones municipales y en tiempos de tiempos de policrisis, las corporaciones locales tienen algo-mucho que hacer por sus ciudadanos.

Empezar por “una información veraz” es una base imprescindible para hacer y deshacer, buscando soluciones reales para todos los cordobeses.

¿Por qué la S. S. no informa y por qué los políticos cordobeses están callados y silentes?

Córdoba, a 6 de noviembre de 2022

Fdo. Enrique García Montoya

Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.