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Pensiones consensuadas al estilo Escrivá (rajonismo puro y duro)

Leo que el Sr. Rajoy – Expresidente del Gobierno ha sido “mediador” entre el Presidente del P.P. Sr. Feijóo y el Sr. Conde Pumpido Presidente del Tribunal Constitucional, y, que A. N. F. no ha aceptado dicha mediación, lo que sin duda es prueba de que el P. P. está ahora en manos prudentes.

Lo anterior viene a cuento, porque las acciones y omisiones del Presidente Rajoy son como para ponerse a rezar con llanto incluido, de modo, que sólo como ejemplo a título enunciativo abierto de lo que no puede ni debe ser:

*Cogió un Partido con mayoría absoluta y lo dejó donde estamos.

*Aprobó una amnistía fiscal de nefasto recuerdo y peores resultados, donde sigilosamente se acogieron todos los defraudadores habidos y por haber, de la que, además, no se ha vuelto a saber.

*Eligió y acogió con su demostrada inanidad al Sr. Escrivá, a la Sñrª. Calviño, al Sr. Simón de la epidemia del coronavirus, y, así un largo etc. de personas entregadas a la defensa de los valores y principios democráticos del centro y de la derecha. El resultado está a la vista.

*Lo expuesto exime de mayores comentarios.

Los Empresarios (CEOE, ATA, etc.) dicen, a la vista de la reforma consensuada al estilo Escrivá, que todo es un disparate contra las empresas y que no puede ser, olvidando el extraordinario pasteleo que han tenido y vienen teniendo con el Gobierno del Presidente Sánchez, cuando deberían recordar sus acuerdos varios con el Gobierno, tal como ocurrió, por ejemplo, con la Reforma Laboral,  que tan justos y perturbadores resultados está dando con el empleo y el paro.

Ha llegado el momento, no de quejarse, sino de hacer propuestas serias y sensatas sobre las pensiones y su reforma, teniendo en cuenta la realidad social y económica de España, de manera, que eso es lo que se espera del resto de Partidos Políticos que no son el Gobierno y sus afines, así como, de cualquier parte interesada como son los Empresarios.

N.B. La Reforma anunciada del Ministro Escrivá puede ser buena o mala, pero, lo que no se puede negar, es, que es una propuesta.

Los empresarios y el resto de partidos políticos deben poner sobre la mesa y a la vista informada de los españoles su propuesta sobre las pensiones, pues ha llegado el momento de ofrecer algo concreto y dejar de llorar.

Que la anunciada es una reforma de las pensiones de pan para hoy y hambre segura para mañana, la mayoría de los expertos en S. S. lo sabemos. Quejarse sólo no sirve ya.

No estaría mal, empezar a explicar a los españoles la realidad en la que estamos, y, frente la reforma del Ministro Sr. Escrivá, exponer una reforma concreta, que, además, de ser respetuosa y justa para los pensionistas ofrezca medidas y soluciones viables acordes con nuestra situación económica y social.

Con 3.500.000 parados oficiales, con un empleo en regresión en cantidad y en calidad, con una productividad en descenso por hora trabajada, con una deuda pública disparada, con un crecimiento económico en declive, con un gasto publico en ascenso continuado, etc. etc. es necesaria otra propuesta que no sea la del Gobierno-Escrivá, todo los demás son distracciones electorales dirigidas al Pueblo Español, al que muchos políticos y empresarios consideran incapaz de pensar y decidir en libertad. Inanidad rajonista.

Pronto habrá que escoger y votar, pero los ciudadanos, pensionistas o no, necesitan tener información veraz y seguridad en saber lo que hay y lo que no hay, lo que es posible y lo que es imposible, y, por lo tanto, una verdad o un engaño.

Córdoba, a 11 de marzo de 2023

Fdo. Enrique García Montoya

Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.

Empleo y paro III (trabajo por horas – contratos indefinidos y temporales – información veraz)

Preguntan una y otra vez sobre el paro real de España, pues parece, que muchos no se creen las cifras oficiales de empleo, que se han publicitado, así que, hay que señalar previamente unos cuantos puntos, que ayudarán a comprender donde reside la desinformación publicada por el Gobierno en el tema del paro y del empleo:

1º.- Los números del Gobierno sobre el empleo y paro no son veraces, pues están situados fuera de la realidad, al no reflejar cifras verdaderas, sino que vienen ofreciendo componendas formales dulcificadas, que confunden o esconden la magnitud del problema.

La cifras de personas sin empleo real en España producen una fortísima desazón y gran incertidumbre, no solo por sus números desconocidos realmente (añadir a los datos oficiales publicitados para acercarnos a un dato cierto: los –inactivos-, las -cifras engañosas del empleo público que disfrazan el problema-, el -trabajo por horas-, la -verdad del trabajo indefinido parcial-, los -trabajadores en ertes-, las -personas que no se computan como desempleados-, etc.), sino también, por la distribución desigual del desempleo por sectores, por regiones,  así como, por razón de edad -menores y mayores de 50 años- y de género.

2º.- La información veraz que consagra la Constitución en su artículo 20. 1., cuando dice, que se reconocen y protegen los derechos: d). A comunicar o recibir libremente información veraz por cualquier medio de difusión, es algo extraño y lejano.

No solo ahora con este Gobierno y esta Ministra de Trabajo, sino que la práctica política trolosa y falsaria viene de lejos, también, con otros gobiernos, pues todos ellos creen firmemente, que los españoles estamos en un pasmo comatoso de tontuna y que nunca se producirá una reacción de la sociedad civil, que los retire a casi todos del poder, que el pueblo soberano les ha delegado temporalmente. 

3º.- Oficialmente crece el empleo, pero curiosamente baja el PIB disminuyendo la productividad, de forma, que hay menos parados oficiales, más empleo, pero decrece la riqueza.

Como lo que no puede ser es imposible, la única conclusión razonable es que los datos de empleo oficiales están trufados con engaños y falsas realidades, ya que, si por ejemplo, se cuentan como ocupados trabajadores a tiempo parcial que prestan servicios dos horas al día según contrato o se consideran trabajadores indefinidos los que trabajan unas horas, es evidente, que las cifras de empleo y paro están fuera de la realidad, ya que, igual que se les considera a esos productores como ocupados indefinidos, también se les podría considerar como parados por horas. En definitiva, que los números oficiales de empleo y paro no se corresponden con la realidad.

4º.- La cifras que se publicitan de afiliaciones y altas en la Seguridad Social pecan del mismo defecto, ya que, el trabajador, que se da de alta o se afilia a la S. S. un par de horas o se da de baja al día siguiente, no es un productor ocupado realmente, sino que la realidad encierra una falacia de ocupación, que lógicamente se reflejará en la productividad.

5º.- La temporalidad en España no es el único verdadero problema de nuestro de nuestro mercado de trabajo, ya que, al día de hoy los contratos por horas están ocupando el espacio que la contratación temporal está abandonando, forzada por una normativa inflexible y amenazante, situándonos hoy en unos datos de trabajo a tiempo parcial (contratos indefinidos o temporales), que con seguridad ya superan cualquier cifra de contratación temporal.

Oficialmente crece el empleo, pero curiosamente baja el PIB disminuyendo la productividad, de forma, que hay menos parados oficiales, más empleo, pero decrece la productividad. Algo está fallando o algo no es verdad.

Por otro lado, “el desempleo estructural” en España que es el triple de las cifras de la U. E., se intenta difuminar en el vacío camuflándolo en otros asuntos menos urgentes, como, pueden ser entre otros, la temporalidad y las pensiones, consiguiéndose así oficialmente,  que el problema del paro estructural tremendo quede laminado para los españoles, de manera, que se oculta el número inquietante de personas inactivas reales, en un alarde de desinformación veraz contrario al mandato constitucional.

El paro estructural en España es una realidad muy negativaninguna solución pública apareceaunque lo peor para nuestro mercado de trabajo empieza a vislumbrarse a través de otros asuntos, que indican, se quiera reconocer o no, que nuestro paro estructural va a quedar abandonado por los poderes públicos:

** La inflación casi permanente se ha establecido, de forma, que el IPC se dispara y los ciudadanos ven que el crecimiento de los precios se está al alza, de manera, que las cuentas públicas empiezan a notarlo. Si las previsiones sobre la inflación se mantienen o crecen, por la razón que sea, solo por poner un ejemplo, la cotización de los títulos de deuda caerá, aunque el BCE continúe dopando el mercado con la compra de bonos, con todas las consecuencias negativas que ello conllevará.

** La recuperación predicada oficialmente no está llegando por ahora a la gente de a pie y, además, la OCDE hunde nuestro PIB al 4,5%, situándonos a la cola de Europa.

** Todos los esfuerzos y todas las propagandas oficiales están en las reformas del mercado laboral unidireccionales y de las pensiones con olvido de todo lo demás, por supuesto, con olvido manifiesto del paro estructural y sus consecuencias nocivas.

España necesita urgentemente reducir su tasa de paro estructural igualándola a la de la U.E., lo que implica aumentar la riqueza productiva y mejorar la cualificación profesional de los trabajadores de forma continua y permanente, dictando normas que acrecienten la flexibilidad propiciando un mercado de trabajo justo y equitativo, dominado por la mejora de la rentabilidad y la creación de riqueza.

N.B. En España el problema real del trabajo ahora no es solo la temporalidad, sino la producción por horas – indefinidos y temporales –, la falta de información veraz, la reducción de la productividad y la falta de flexibilidad real del mercado de trabajo.

El paro estructural en España supera cualquier magnitud razonable, pero si le unimos la deuda pública, el PIB decreciente, la inflación disparada, el déficit público, el gasto público descontrolado, la inseguridad jurídica y una recuperación renqueante, la incertidumbre que atenaza a los españoles se convertirá en una desgracia permanente, donde en primera fila estarán por mucho tiempo los millones de españoles reales en el paro.

Por otro lado, intentar solucionar el problema con el olvido es, como se está viendo, un disparate, ya que, la recuperación económica y social de España entrará en un laberinto de salida imposible.

La postura inane tancredista no da solución a ningún problema, y, en España ya vamos sobrados de actitudes de reposo público en relación con la solución del paro estructural, que solo llevan a la desesperanza y a la incertidumbre.

Córdoba, a 9 de diciembre de 2021

Fdo. Enrique García Montoya

Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.

Empleo y paro II (deuda – inflación – déficit público – PIB – inseguridad e incertidumbre)

En estos días de incertidumbre e inseguridad jurídica “el desempleo estructural” parece olvidado por los poderes públicos, difuminándose en el vacío, preterido por otros asuntos menos urgentes, como, pueden ser entre otros, las pensiones y la reforma laboral, que están consiguiendo, que el problema del paro quede laminado para los españoles, de manera, que se oculta el número inquietante de personas inactivas y en paro.

El número de personas sin empleo real en España es aterrador, no solo por sus cifras, desconocidas realmente (ver, los –inactivos- y las -cifras engañosas del empleo público que disfrazan el problema-, etc.), sino también, por la distribución desigual del mismo por sectores, por regiones, por razón de edad -menores y mayores de 50 años- y de género.

El paro estructural en España es una realidad muy negativa, que, además, habiéndose adoptado por los poderes públicos una actitud tancredista hacia la inanidad, ninguna solución aparece, aunque lo peor para nuestro desempleo empieza a vislumbrarse a través de otros asuntos, que indican, se quiera reconocer o no, que nuestro paro estructural va a quedar abandonado por los poderes públicos, que tendrían la responsabilidad indudable de afrontarlo y combatirlo, de forma, que ahora conviene detallar una serie de asuntos preocupantes, que distorsionarán aún más el mercado de trabajo y enquistarán nuestro paro estructural aún más si cabe, así:

** La deuda pública ha marcado un nuevo máximo histórico en septiembre y alcanza el 122,1% del PIB.

Es un hecho indiscutible, que sin planes de política fiscal fiables vamos hacia una crisis de deuda pública, máxime, por el efecto de choque que puede tener para España el final de las compras de emergencia de bonos en abril de 2022, debido al descontrol del déficit, pues, ya se da por descontado es que no se prorrogará el Programa de Compras de Emergencia Pandémica (PEPP), cuando venza en marzo.

La cuestión es clara, si el BCE deja de comprar a España todas las emisiones de deuda, como viene haciendo, el Estado tendrá que colocarlas en el mercado, y, por los fuertes desequilibrios de nuestra economía y la negativa del Gobierno a tomar medidas para reducirlos, lo normal es, que los vayan a invertir exijan una prima de riesgo cada vez más alta, lo que disparará los costes financieros del Estado, agravándose el déficit con lo que iríamos hacia crisis de deuda:   Con una prima de riesgo por encima de 600 puntos básicos España puede caer al abismo de la expulsión de la U. M. y fuera del euro.

Es un hecho, que los precios de la deuda están en máximos por las compras realizadas por el BCE, lo que quiere decir, también, que su rendimiento está en mínimos casi desconocidos y ello conlleva que una gran cantidad de bonos europeos tiene rendimientos negativos; es decir, que el comprador recibirá menos dinero de lo que invierte, lo que supone algo perverso en la política monetaria actual, sin olvidar, que esos rendimientos negativos incluyen la expectativa de una inflación nula o negativa.

La política del BCE con tipos de interés a cero, se quiera aceptar o no, tiene fecha de caducidad, de manera, que, en algunos Estados Miembros (no solo los frugales), como Alemania, se empiezan a ver movimientos de subida de los tipos de interés y la consiguiente inflación, hecho que tendrá consecuencias negativas en los países fuertemente endeudados.

** La inflación se ha salido de madre, de forma, que el IPC se dispara hasta el 5,6% en noviembre, la tasa más alta desde hace muchos años.  Los ciudadanos ven ya, que la inflación está empezando a mostrar su fea cara y, sin duda, tendrá su impacto en los tipos de interés de mercado, por lo que las cuentas públicas empezarán a notarlo.

Si las previsiones sobre la inflación se mantienen o crecen, por la razón que sea, la cotización de los títulos de deuda caería. Es decir, sus rendimientos aumentarían, aunque el BCE continuara dopando el mercado con la compra de bonos.

** El descontrol del déficit publico es algo incontenible, de forma, que con un crecimiento del gasto grandioso difícilmente se cuadrarán los gastos con los ingresos del Estado, lo que lleva a una política continuada de endeudamiento y hasta donde se llegue llegó.

** Los Fondos de Europa tardan más de la cuenta y cuanto mayor sea la tardanza mayor será la condicionalidad exigida por Bruselas y nuestros socios cada vez más frugales.

A su vez, lo Fondos la U. E. no viene todos a la vez ni sin condiciones, de forma, que la cuestión no solo está en recibirlos, sino también como gastarlos, de forma, que ayuden a la recuperación y no provoquen rechazos ni vetos en Europa.

** La recuperación se está ralentizando y no está llegando por ahora a la gente de a pie. La OCDE hunde nuestro PIB al 4,5%, situándonos a la cola de Europa.

** Los Ertes son un instrumento fallido y agotado en su actual configuración, si no van acompañado de medidas coyunturales inmediatas y eficaces, especialmente, a través de ayudas directas a las empresas solventes y/o recuperables.

Así mismo, es un hecho real que las empresas insolventes y zombis se multiplican agazapadas en préstamos ICO y en regulaciones de empleo ficticias, que camuflan empleos inexistentes.

El B. E. calcula, que actualmente el 40% de los negocios españoles arrastra problemas para cubrir sus gastos, mientras que más de un 14% ha alcanzado la insolvencia.

** Todos los esfuerzos y toda la propaganda están en las reformas del mercado laboral unidireccionales y de las pensiones con olvido de todo lo demás, por supuesto, con olvido manifiesto del paro y sus consecuencias perversas.

El número real de desempleados estructurales se sitúa ya en una cifra desconocida de millones de personas, y, además, la cifra de paro se distribuye de forma irregular por las CC. AA. y entre ellas mismas territorialmente, a la vez, que existen colectivos de trabajadores donde el desempleo es una verdadera tragedia: Jóvenes, mayores de 50 años y mujeres.

El asunto crucial para todos los españoles que es el desempleo y su tremenda tasa, casi innombrable, está desaparecido de la discusión pública, especialmente, de todos los poderes públicos con algunas exiguas excepciones.

España necesita urgentemente reducir su tasa de paro igualándola a la de la U.E., lo que implica la adopción de medidas eficaces para aumentar la riqueza productiva, mejorar la cualificación profesional de los trabajadores de forma continua y permanente, dictar normas que acrecienten la flexibilidad y mejoren todas las condiciones de trabajo, no solo los salarios, y, en definitiva, crear un marco de empleo que propicie un mercado de trabajo justo y equitativo, dominado por la mejora de la rentabilidad y la creación de riqueza.

N.B. El paro estructural en España supera cualquier magnitud razonable, pero si le unimos la deuda, el PIB decreciente, la inflación disparada, el déficit público, el gasto público descontrolado, la inseguridad jurídica y una recuperación renqueante, la incertidumbre que atenaza a los españoles se convertirá en una desgracia permanente, donde en primera fila estarán por mucho tiempo los millones de españoles en el paro.

Por otro lado, intentar solucionar el problema con el olvido es, como se está viendo, un disparate,  pero si, además, se disparan todos los demás asuntos enunciados, el desastre será insostenible, ya que, la recuperación económica y social de España entrará en un laberinto de salida imposible.

La postura inane tancredista no da solución a ningún problema, y, en España ya vamos sobrados de actitudes de quietud extrema, que solo llevan a la desesperanza.

Córdoba, a 1 de diciembre de 2021

Fdo. Enrique García Montoya

Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.

Gasto público – deuda – tipos negativos – una mentira (hechizados por BCE)

El gasto público en España se viene pagando, en gran medida, acudiendo a la deuda, de forma, que a pesar de los Fondos de Recuperación de la U. E. (cuando lleguen), el peso de la deuda en la financiación del tremendo gasto público será muy importante e irrenunciable por ahora. No hay más que ver el gasto de la Seguridad Social (pensiones, etc.) y el resto del gasto público para comprender, que ni con los ingresos del Estado por impuestos, ni con los fondos europeos, será posible prescindir del dinero procedente de la deuda que seguirá aumentando, ya que, el Gobierno de España no está por la labor de realizar ajustes estructurales en el gasto público, no hay más que seguir la deriva de nuestro gasto en aumento constante e improductivo para comprender hacia donde irá nuestra deuda.

El BCE, además, ha ido asumiendo parte de esa deuda en claro aumento, de manera, que más pronto que tarde llegará a su tope, y, no quedará otra, que acudir a los mercados a colocar nuestra deuda, que mientras los tipos de interés sean negativos no habrá problemas, pero si los inversores pierden la confianza y los intereses suben la situación será muy complicada.

Parece oficialmente, que España ha terminado 2020 con una deuda pública del 120% del PIB o muy superior (ya que domina la opacidad casi absoluta), un déficit fiscal por encima del 11% y una desaceleración económica sobre el 12% del PIB, pero, curiosamente, se habla por los “mentideros” de la magia del BCE al dopar la deuda pública y diciendo, además, que es sostenible, aunque la verdad es que todo se mantiene por la falacia de los tipos negativos, de los que los ciudadanos de a pie están excluidos.

El Gobierno de España pueden emitir deuda pública hasta un cierto listón, de manera que, más allá de ese límite real, las consecuencias serán un incumplimiento total o un incumplimiento parcial en forma de inflación.

En España si la deuda sirve para generar crecimiento y productividad el camino sería aceptable, ya que, solo si los fondos recaudados a través de la deuda emitida se invierten en proyectos de infraestructura con rendimiento real la solución llegará, pero si el dinero se gasta solo en apoyo de políticas sociales subsidiadas sin productividad, el incumplimiento se alcanzará más pronto que tarde.

Desgraciadamente, el Gobierno de España no va a poner en marcha programas de ajustes y austeridad por su coste político, que no quiere asumir, (no hay más que examinar los Presupuestos del Estado aprobados), mientras que, tampoco, podrá aumentar la recaudación con más impuestos de manera suficiente, aunque siempre podrá no pagar la deuda, algo casi descartable por ahora, razón por la que, sin duda, dado el rumbo de nuestro gasto aparecerá la inflación, porque se habrán alcanzado los límites de la deuda que podemos pagar.

Que conste, que no tomo una postura pesimista, al contrario, creo, que se quieren tomas medidas de control del gasto público, como las anunciadas en relación con la S. S., sin embargo, temo que serán insuficientes, aunque por ahora aguantaremos con los fondos europeos de recuperación, pero si no restablecemos nuestro sistema productivo y reestructuramos el gasto hacia la inversión productiva y hacia la rentabilidad, el límite de nuestra deuda está más cerca que lejos.

N. B.  La deuda empujada por el gasto improductivo, aunque sigan por ahora los tipos negativos, llegará a un límite insoportable, y, la mentira dopada del BCE se romperá en un hechizo real de posibles impagos en cualquiera de sus formas.

Si continuamos el camino marcado en los Presupuestos aprobados, es una realidad, que vamos abocados a un terreno perverso, ya que, que los fondos de recuperación de la U. E. solo cubrirán un tercio de nuestras necesidades de gasto, los ingresos del Estado (aunque se suban impuestos, en estos momentos de ruina una política desacertada) serán insuficientes y la deuda llegará a su límite de no retorno.

La magia del BCE dopando la deuda pública no puede ser para siempre, digan lo que digan, máximo dos años, después vendrá la realidad si no cambiamos el rumbo, sin olvidar, que los ciudadanos no perciben en su día a día las ventajas de los tipos negativos de interés, que solo llega con claridad a los poderes públicos y sus allegados financieros.

Solo existe una solución aceptable, reestructurar el gasto público hacia la inversión y la productividad, realizando todos los ajustes que sean necesarios, pero siempre con respeto a nuestros derechos y libertades constituciones, con igualdad social y sin que exista discriminación en ningún colectivo y/o territorio.

Córdoba, a 4 de enero de 2021

Fdo. Enrique García Montoya.

Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.

Desconfinamiento ya – Virus económico (empresas quebradas, paro, deuda y déficit)

 

Ha llegado el momento de levantar el confinamiento y devolver a los españoles sus derechos y libertades (entiendo, que es innecesario para ello, por sabido por todos, citar el art. 116 de la C. E., ni el art. 55, 1. de la misma), pues el estado de alarma no puede seguir limitando  a los españoles sus derechos fundamentales consagrados en la Constitución, de forma que reclamo, que se nos devuelvan los derechos a la libertad en todas sus manifestaciones (el derecho a una información veraz, el derecho a la libre empresa, el derecho al trabajo y, en resumen todos los derechos constitucionales establecidos en el Título I de nuestra Carta Magna), habiendo llegado el momento -de que si el Gobierno no nos devuelve ya nuestros derechos-, de acudir al art. 53 de la Constitución, y, debiendo toda la sociedad civil en bloque acudir  a los Tribunales ordinarios (por un procedimiento basado en los principios de preferencia y sumariedad) y, en su caso, a través del recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.

La recesión, según el Banco de España, llevará a una caída del 13,4% del PIB español y nos daremos un golpe económico devastador, además, bajo un silencio atronador por parte del Gobierno. Es una realidad, que la gran recesión se ha apoderado de España, miles de empresas están ya quebradas y/o paralizadas, el paro puede superar la tasa del 23%, la deuda será insostenible y tendremos un déficit incalculable, de manera que, si no reaccionamos con fuerza, no podremos iniciar la recuperación como está ocurriendo ya en otros países de la UE.

En esta situación, resulta sorprendente, que el Gobierno se resista a ofrecer cifras y previsiones sobre la situación económica, cuando existe un recuento oficial permanente de infectados y muertos, lo que contrasta con el absoluto silencio oficial que existe en torno a la recesión. El Gobierno, como en casi todo, está grogui, paralizado e inane, y, su máxima responsable, la Vicepresidenta de Economía, Nadia Calviño permanece en la mudez y se niega a realizar estimaciones sobre el desplome de nuestra economía y a plantear planes de recuperación.

Hay que empezar, a planificar y reiniciar nuestra economía con transparencia plena y con la participación de todos, de manera que el Gobierno no puede seguir sonámbulo en la inacción permanente, hace falta diálogo permanente con todos y para todo, sobre todo con aquellos que saben. No podemos seguir, en manos de un mando único filosófico aparcado en el desconocimiento económico y atrancado en la inoperancia de su propia incapacidad.

Es una realidad, que en España sufrimos un confinamiento demasiado estricto y de una duración peligrosísima. El país ha estado y sigue, prácticamente, parado, de forma, que aproximadamente, el 80% de las empresas ha visto reducida su actividad, una mitad ha decidido paralizar sus planes en todos los sentidos y muchas han optado por cerrar, simplemente, están quebradas.

Por lo dicho, veamos algunos puntos, que nos darán información sobre nuestra realidad económica, así:

Déficit.

España cerró 2019 con un déficit público del 2,8% del PIB. La agencia estadística europea, Eurostat, en su informe ha señalado, que el diferencial entre ingresos y gastos fue negativo en 35.195 millones de euros, de forma, que esta cifra de déficit supone unos 2.300 millones más de lo que había anunciado el gobierno. Por otro lado, el tamaño del Estado entre 2018 y 2019 ha vuelto a producir un aumento progresivo del peso mismo, que en 2019 alcanzó el 41,9% del PIB, calculándose. que el déficit llegará al 12% del PIB en 2020.

Deuda.

La deuda, en cifras absolutas, ha registrado un aumento hasta los 1.188.862 millones de euros con los que cerró 2019, de manera, que el peso de la deuda con respecto al PIB supone, realmente, se quiera ver o no, el 100% del PIB, puesto que existen conceptos que no se computan en su cálculo oficial.

Por otro lado, la deuda pública, por su parte, se situará, como mínimo, en el 120% del PIB en los próximos años, lo que supondrá unos 300.000 millones de euros adicionales, por la sencilla razón, además, de que el Gobierno no podrá acudir a nuevas subidas de impuestos, salvo, que se quiera suicidar y destruir el sistema económico en España.

Paro.

Es un hecho cierto, que el tremendo descenso de la actividad económica tendrá consecuencias perversas y cuantiosas sobre el mercado de trabajo, de forma, que la tasa de paro podría llegará al 23% a cierre de 2020, y, lo que venga años después es algo ignoto.

Además, no se debe olvidar, que partimos de una realidad durísima, así: EPA 4T – 2019 – Habitantes:  47.100.396 – — Hombres:23.089.390 – Mujeres: 24.011.006 – Tasa de paro: 13,78% – Tasa de actividad: 58,74% – Ocupados: 19.066.9. miles – y – Parados: 3.191.9. miles -.

Por todo ello, la crisis económica en el empleo tendrá unas consecuencias desastrosas, si no iniciamos un desconfinamiento rápido, flexible y continuo. El confinamiento hay que levantarlo ya por zonas y sectores, paulatinamente, ya que la prolongación de restricciones tan duras supondrá la quiebra del País.

N.B.  El confinamiento en España debe terminar ya y ahora, pues nuestros derechos y libertades básicas así lo exigen, a la vez, que nuestra economía no podemos dejarla morir, razón por la que hay que iniciar la recuperación de nuestro tejido productivo, empezando por los sectores más esenciales para nuestra economía y por zonas, con la finalidad, además, de crear empleo cuanto antes y frenar el paro antes de que nos ahogue.

Por cierto, es una realidad, qué sin la participación de todos y sin transparencia e información veraz, como consagra el art. 20 de nuestra Constitución, nada será posible ni deseable.

Córdoba, a 23 de abril de 2020

Fdo. Enrique García Montoya

Abogado ICA-Córdoba. Inspector de Trabajo y S. S.